La Red de Alerta e Información Fitosanitaria de Andalucía (RAIF) confirmó un nuevo brote de podredumbre parda de la patata, una enfermedad causada por la bacteria Ralstonia solanacearum, en una parcela de Córdoba.
El pasado 10 de julio, el Laboratorio de Control Oficial Agroalimentario y Agroganadero de Sevilla detectó la presencia del patógeno en una muestra de patata de siembra. Este hallazgo fue confirmado posteriormente por el Laboratorio Nacional de Referencia de Bacterias Fitopatógenas, utilizando métodos de detección molecular y aislamiento, cumpliendo así con los requisitos establecidos por la normativa vigente. Además, se identificó que se trata del filotipo II de la bacteria.
Este brote supone un nuevo desafío para el sector fitosanitario, ya que esta enfermedad representa una seria amenaza para los cultivos de patata, tomate y otras solanáceas.
A continuación, te contamos todo lo que necesitas saber sobre esta bacteria, los riesgos asociados y las medidas para prevenir y erradicar esta enfermedad.
Esta es una enfermedad producida por la Ralstonia Solanacearum, una bacteria fitopatógena responsable de dos enfermedades principales:
Esta bacteria no solo afecta el rendimiento y la calidad de los cultivos, sino que también representa un alto riesgo de propagación si no se controla.
El primer caso identificado en España como podredumbre parda fue en 1996, también en cultivos de patata. Desde entonces se han localizado diversos focos añadiendo también el tomate como cultivo afectado.
Síntomas de esta enfermedad: ¿Cómo la detecto?
Puede ser difícil de identificar, ya que sus síntomas pueden confundirse con los de otras enfermedades, sin embargo, los síntomas más comunes incluyen:
En algunos casos, los tubérculos infectados no presentan síntomas externos, lo que hace necesario un diagnóstico de laboratorio para confirmar la enfermedad.
La Ralstonia Solanacearum prospera en condiciones específicas que pueden acelerar la propagación de la enfermedad:
Además, los tubérculos infectados, incluso aquellos con infección leve o latente, son una de las principales vías de transmisión. Otros factores de riesgo incluyen:
Las medidas profilácticas y de higiene son esenciales para evitar la propagación de la podredumbre parda de la patata. Entre las acciones recomendadas se encuentran:
El Reglamento de Ejecución (UE) 2022/1193 establece las medidas fitosanitarias obligatorias para erradicar y prevenir la propagación de la bacteria. Estas incluyen:
Para compensar las pérdidas económicas derivadas de estas medidas, la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía publicó una orden el 15 de noviembre, estableciendo un baremo para calcular las indemnizaciones a los agricultores afectados.
Este nuevo brote pone de manifiesto la necesidad de una vigilancia constante en el sector fitosanitario. Enfermedades como la podredumbre parda de la patata no solo amenazan la producción, sino que también impactan directamente en la sostenibilidad y economía del sector agrícola.
Desde Tecfito, destacamos la importancia de estar al día con las noticias del sector fitosanitario, así como de adoptar soluciones tecnológicas que permitan un mejor control y prevención de enfermedades en cultivos.
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